La buena prácticadel estudio en la universidad, y del trabajo intelectual en general, se basa en dos principios:
Usar la información ajena respetando y reconociendo nuestras fuentes.
Usar la información ajena para conocer, para aprender, para mejorar.
Dicho de otra manera: todo lo contrario a “copiar para salir del paso, rápido y sin esfuerzo”.
Lo primero es que debemos ser conscientes de que la información ajena es realmente propiedad intelectual deotros, con independencia de la cuestión de los costes (gratis o no) o de la forma en que hayamos accedido a ella (en internet, fotocopiando o consultando un artículo de una revista en la biblioteca, un libro prestado por un amigo, etc.)
Está permitido:
Hacer una copia privada, para uso exclusivamente personal, para estudiar mejor.
Incluir breves fragmentos de texto ajeno entrecomillado, diferenciando bien lo prestado de lo propio y citando y referenciando la fuente, la procedencia, como explicamos en CITAR.
Reseñar, comentar, glosar, parafrasear, criticar, resumir o aludir a información ajena, de manera sucinta y proporcionada a la dimensión de nuestro trabajo, citando y referenciando la fuente de igual modo.
No está permitido:
Insertar textos o datos ajenos sin entrecomillar y sin citar la fuente de procedencia.
Incluir imágenes o gráficos sin citar la procedencia o con fines ornamentales, no informativos.
Copiar texto ajeno haciendo pequeños cambios en el lenguaje usado para disimular.
Comprar, encargar o pedir a otros los trabajos o estudios que vamos a firmar como autores.
Plagio:Copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias (R.A.E.) Mediante el plagio se copian datos, frases, fragmentos o ideas no literales de un documento de otro autor, sin decirlo, sin citar la fuente, por afán de engañar o por descuido.
CERRAR
¿Por qué debemos respetar todo esto, por qué no debemos plagiar?
Porque perjudica nuestra formación y cualificación a largo plazo, nos hace peores profesionales.
Nos acostumbra a un camino que nos empobrece, nos vuelve menos capaces, creativos, innovadores.
Plagiar es con frecuencia un acto egoísta e insolidario que hace daño a personas inocentes.
A nosotros tampoco nos gustaría que se aprovechasen de nuestro trabajo sin más.
Puede entrañar además responsabilidades penales o sanciones académicas.
Las mismas tecnologías que sirven para copiar con facilidad permiten descubrir los plagios.
Usar, respetar y reconocer las fuentes promueve nuestra excelencia profesional, nos hace aprender.
Y aprender nos hace más competentes, más autónomos, más libres y más valiosos.
Muy interesante...
ResponderEliminarPor cierto he encontrado este video del ITE sobre la escuela 2.0 (interesante también)
http://www.ite.educacion.es/es/escuela-20
Sí, lo conozco Ester. Un beso y feliz finde ;)
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